Momotaro

"El hombre famoso" era calladamente un dios y muy pequeño, pero también era un héroe, más para la nobleza de sus propósitos que para la guerra. Momotaro combina las dos cualidades.

Empezó naciendo en un melocotón; una pareja recojio este melocoton, cuando ellos lo abrieron vieron a un muchacho allí dentro de pequeña miniatura. Le pusieron el nombre de Momotaro que quiere decir el "niño del melocoton". La pareja lo cuido como si fuera su propio hijo y lo educaron en la adoración del valor y de la ejecución del deber.

En ese área las personas estaban en panico porque algunos onis que, bajaron a la Tierra y vivian en una isla cerca de donde vivia Momotaro, empezaron a robar los tesoros de las personas. Momotaro que ya tenía quince años decidió actuar, antes de partir hacia su mision, su madre le dio un poco de pasteles de arroz y unas ropas.

En el camino se encontro a un perro, un faisan y a un mono. Los tres hablaban y cuando Momotaro le dio los pasteles, le empezaron a seguir y a unirse a su misión. Al llegar a la costa encontraron un barco y de ahi partieron a la isla de los Onis.

Cuando llegaron a tierra firme, encontraron a chicas secuestradas y encarceladas por los Onis. Momotaro les prometio que tras derrotar a los Onis, volverian a sus casas con sus familias.

Así, con la ayuda de sus amigos animales, atacó el castillo de los onis y mató a todos, menos el jefe Oni que murio en manos de Momotaro en un duelo. El cuarteto libero a todos los prisioneros humanos del castillo y lo llevaron al barco junto a los tesoros de las familias robadas por estos Onis. El viaje de regreso fue tranquilo y cada ser humano volvio a casa y fue devuelto sus tesoros. Los padres de Momotaro no se creyeron que su hijo derrotara a todos los Onis, trayendo el propio Momotaro sus ropas que le dieron. En cuanto al perro, al faisán y el mono, solo querian conseguir la gloria de ayudar al joven heroe y a cambio le dieron de nuevo pasteles de arroz a cada uno.